En primer lugar debemos desenganchar las correas para así trabajar con una mayor comodidad.

Aplicamos mucho calor con una pistola de aire caliente, introducimos una herramienta fina y rígida, y por el hueco por donde hemos introducido en nuestro caso, la púa metálica, inyectaremos unas gotas de alcohol isopropílico, para que una vez el adhesivo que después de aplicarle calor se encuentra blando, no vuelva a endurecerse y pegarse de nuevo.

Repetiremos el proceso de inyectar unas gotas de alcohol en los cuatro laterales del smartwatch, hasta que podamos levantar la pantalla.

IMPORTANTE: No introducir demasiado la herramienta, ya que se podría dañar el LCD.

Desenganchamos la cubierta plástica que cubre el conector de la pantalla, y ayudándonos de una herramienta plana desconectaremos la pantalla.