Extraemos los dos tornillos Pentalobe (TS1) de la zona inferior del iPhone.

Aplicamos calor a la pantalla para ablandar el adhesivo que la sujeta, y con la ayuda de una ventosa y una púa metálica nos abriremos un pequeño hueco, por el cual introduciremos una púa plástica, y con ella iremos despegando todos los bordes de la pantalla, teniendo cuidado de no dañar los flex que unen la pantalla a la placa base.

Retiramos los ocho tornillos Triwing (Y0.6) que sujetan el blindaje, y ayudándonos de unas pinzas lo retiraremos.

Desconectamos la batería para trabajar con una mayor seguridad.

Ayudándonos de una herramienta de punta plana desconectaremos el flex de la pantalla y el flex con el sensor de proximidad, que se encuentra adherido a la pantalla.

Retiramos los dos tornillos Phillips (PH#00) que sujetan el blindaje que cubre el sensor de proximidad, y con la ayuda de unas pinzas lo retiraremos.

Desenganchamos la zona de los sensores con unas pinzas, y ayudándonos de unas gotas de alcohol isopropílico y una herramienta plana, despegaremos el flex averiado de la pantalla.